¡Eeeh, pibes! Hoy 6 de noviembre arrancó el megajuicio por los cuadernos de las coimas en el Tribunal Oral Federal 7, con 87 imputados: Cristina Kirchner al frente, más Julio De Vido, Roberto Baratta, Ricardo Jaime y 65 empresarios como Aldo Roggio o Ángelo Calcaterra; datos duros: 19 exfuncionarios, 2 choferes, 626 testigos y acusaciones de asociación ilícita desde 2003.
El bardo explota con el posteo de CFK horas antes: lo tilda de "opereta judicial" descongelada pa' distraer del laburo y jubilaciones, cita a Cúneo Libarona en 2018 alertando extorsión a arrepentidos –"confesá o quedás preso"–, y acusa calendario político pa' tapar el ajuste mileísta.
El golpe revienta en la escala: expediente trucho o no, paraliza la agenda opositora mientras Caputo arma megaendeudamiento con JP Morgan por miles de millones; ironía al palo, fiscales mudos con la guita que nadie ve, pero hipoteca generaciones enteras.
Yo, que vi más causas armadas que facturas en Congreso, te digo posta: peronismo organizado resiste el saqueo, pero si los cuadernos prueban coimas reales, la historia no absuelve ni a tu abuela en tanga –equilibrio posta, sin chamuyo.
¿Creés que los cuadernos son truchos totales o hay fuego real, gil? ¿El juicio distrae del ajuste o limpia la corrupción vieja?
Contame tu visión, máquina de la fantasía: ¿CFK víctima o jefa de la banda?

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