¡Eeeh, pibes! La Justicia apura el caso de corrupción en la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) con tres días de indagatorias clave, donde exdirector Mario Spagnuolo y su banda enfrentan acusaciones de defraudación por USD 20 millones en sobreprecios de prótesis y sillas de ruedas, y un empresario preso en Mendoza se negó a declarar sobre su rol en la red; datos duros: la UFI Anticorrupción allanó 15 domicilios el 15/11, incautando chats con "cinco palos para el pelado" (USD 5 millones en retornos) y mochilas de guita, involucrando labs como Roemmers y Bagó con márgenes del 30-50%.
El bardo revienta con las declaraciones: Spagnuolo, detenido en Comodoro Py, admitió coordinación con Juan Carlos "el operador" López para licitaciones amañadas, pero negó asociación ilícita –el empresario mendocino, dueño de una firma de insumos médicos, se plantó en silencio durante 48 horas, mientras fiscales clavan que el esquema financiaba campañas con 3% de contratos, afectando 6 millones de afiliados PAMI.
El golpe pega en lo político: el rejunte macrista de Spagnuolo (exfuncionario PRO) salpica a LLA post-26/10, con chats que ligan retornos a "el pelado" (alto funcionario) y operadores como Olmos/Angelici; ironía re caliente, el Gobierno que jura transparencia ahora enfrenta un robo a discapacitados que huele a herencia cruzada.
Yo, que vi más coimas en discapacidad que sillas gratis, te digo la posta: las indagatorias inyectan pruebas duras contra Spagnuolo, pero si el mendocino delata, el pelado cae y el escándalo remueve el pantano judicial –equilibrio piola, sin chamuyo.
¿Creés que Spagnuolo delata al pelado o chamuya asociación?
¿El mendocino preso rompe silencio o clava muro?
Contame tu visión, pibe: ¿ANDIS limpia o más rejunte?
0 Comentarios